Claustro

Asociación Cultural por el Patrimonio de Marchena

La planta baja es la pieza más antigua conservada del primitivo convento. Destaca la existencia de dos pozos en su parte central que dan a una gran aljibe suministradora de agua para la comunidad. Está muy alterado por las intervenciones realizadas a mediados del siglo XX.

El diseño del claustro bajo corresponde a las formas características de la arquitectura protobarroca sevillana de comienzos del siglo XVII que deriva de Juan de Oviedo y de la Bandera. Se abre mediante una elegante arquería remarcada por enjutas de traza geométrica y clave resaltada. Tiene semejanzas con los patios de la Casa del Ave María y con la de Narcisa Sanz.

Fue abandonado por la aplicación de la desamortización de Mendizábal de los años 1836-1837. Al poco tiempo la parte exterior superior del convento fue utilizada como vivienda para sacerdote y sacristán de San Miguel.

Hacia 1860 hubo una petición, por parte del Ayuntamiento, de todo el espacio que da al exterior por la calle San Agustín para adaptarlo como Colegio Púbico. Así, a partir de 1863 y durante noventa años, hasta 1953, en toda la fachada exterior del convento funcionó un Colegio Público, en concreto el Colegio de Enseñanza Primaria Superior de Marchena.

A partir de 1915 se instalan en el interior del convento los Padres Mercedarios. A los pocos años abren una escuela privada y, tras la guerra civil comienzan las obras de restauración que se ha comentado. Cuando las obras están llegando a su fin se va a desalojar al Colegio Público y se va a adaptar todo el espacio a un Colegio de Enseñanza Primera y Media que va a inaugurar en 1957. En principio fue centro privado y, a partir de 1963, se convirtió en Centro Libre Adoptado hasta que se clausura en 1973.

Las transformaciones realizadas a mediados del siglo XX fueron dirigidas por el arquitecto Aurelio Gómez Millán. Se reformó toda la planta alta del Claustro. Paralelamente se hicieron otras obras en el convento destacando de entre todas ellas la colocación de una imagen del Sagrado Corazón sobre la estructura de la cubierta exterior de la cúpula central del templo. Para ello hubo que cegar los ventanales primitivos y reforzar con una estructura metálica y hormigón toda la cubierta exterior. La escultura fue realizada por Juan Luis Vasallo Parodi.

En momentos posteriores funcionó en esas aulas varias clases de E.G.B. dependiente del C.P. Juan XXIII. Más tarde ocuparon sus instalaciones una extensión del Centro de F.P. “López de Arenas”.