Retablo de estilo neoclásico de la segunda mitad del siglo XIX y de autor desconocido. Tiene un único cuerpo en tonos marmóreos, blanco y dorado formado por un gran arco de medio punto sostenido por dos grandes columnas de orden corintio.
El arco de medio punto, situado sobre un entablamento clásico, se decora con casetones con motivos florales en el centro y se remata con una cornisa con motivos vegetales.
La gran hornacina central acoge la imagen de candelero de la Virgen del Carmen, de autor desconocido y de la segunda mitad del siglo XIX. Presenta facciones aniñadas, coge al Niño Jesús con su mano izquierda y muestra dos escapularios en la mano derecha. Va vestida con saya y escapulario negro bordado en oro y manto de color marfil. La imagen se rodea de una ráfaga de plata y una corona imperial de plata realizada por el platero sevillano Olavide.
En el centro del banco, un nicho acoge una imagen de la Milagrosa. A uno y otro lado y sobre dos peanas en forma de tambores, que se decoran con guirnaldas, se sitúan las imágenes de san Nicolás de Bari y san Antonio de Padua .