Manuel Cobano Márquez, conocido Manolo Cobano (1926 – 1991), un insigne y digno guitarrista marchenero. Nace en una familia sin antecedentes familiares que se dedicaran al flamenco.
En su afán por aprender recurrió a que le enseñara Chico Melchor – hijo del Lico y hermano de Melchor –. Después aprendería muchas falsetas de la mano de Melchor de Marchena del que aprendería la forma más gitana de tocar. Incluso se desplazaba a Sevilla para recibir clases de Antonio de Osuna, maestro de otros grandes del flamenco como el marchenero y gran guitarrista José Luis Postigo. Fue un gran admirador de Enrique de Melchor y Paco de Lucía.
En 1966 Manolo abrió un bar en la calle San Sebastián formándose una interesante tertulia. Se cuenta que, en verano, cuando Manolo cerraba los sábados “cogíamos unas bebidas, y nos íbamos unos cuantos amigos y cantaores aficionados a San Ginés. (…) Allí, en el pilar, con la fresquita, pasábamos una madrugada de flamenco”. Por el bar de Cobano pasaban desde Melchores hasta “el conde de Marchena” pasando por los hermanos “Calichi”, “Manchao” y Modesto Cortés.
Como excelente guitarrista actuó por toda la comarca acompañando a muchos artistas: en Carmona, Morón, Osuna, Estepa… En la Roda de Andalucía le tocaría a Ricardo Fernández “Marchenita”. En Arahal a Antonio Martín “Niño de Arahal”. En Paradas acompañando a muchos artistas en su Semana Cultural. En Puebla de Cazalla a Diego Clavel y Menese. E incluso a Pepe Marchena en Villanueva de San Juan. Pero, sobre todo, en Fuentes de Andalucía de donde era su amigo íntimo el cantaor José Navarro “Zacarías” “El Niño de Fuentes”. Cobano y Zacarías asistirían juntos a muchos concursos, festivales y fiestas particulares.
Cobano fue uno de los guitarristas asiduos a la Fiesta de la Guitarra de Marchena acompañando a Juan el “Caeno” y a otras figuras consagradas como Rubito de Paradas y el Cabrero. En la de 1971 las tres guitarras del cartel eran Melchor de Marchena, Enrique de Melchor y Manolo Cobano y los cantaores: Pepe Marchena, Fosforito, Menese, Manuel Mairena y el Changuito. Actuaría, igualmente, en festivales y en homenajes a cantaores ilustres como el de Pepe Palanca en el que acompañaría, al igual que su hijo Antonio, a una pléyade de grandes cantaores entre los que estaban Diego Clavel, Rerre de los Palacios, Juanito Maravillas, etc.
De sus descendientes, a los que inculcó su amor por el flamenco, su hijo Antonio aprendió de su padre y ejerció como guitarrista durante muchos años, pero no ha continuado como profesional de la sonanta. Entre sus nietos, Rubén Martín Fernández Cobano (Mey), está muy vinculado al mundo de la guitarra y de la música.